Treinta años después de la Tercera Guerra Mundial, la ciudad de Tokio, ahora rebautizada como Neo-Tokio, es devastada y atacada por bandas de jóvenes. Además, las tramas políticas y revolucionarias giran en torno a Akira, un niño misterioso con un psíquico particularmente intrigante.
Kaneda es el líder de un grupo de jóvenes ciclistas, incluido uno de los miembros, Tetsuo tiene un accidente de tráfico tratando de evitar a un niño con la cara de un anciano. Luego es capturado por el ejército japonés que lo prueba, lo que le da un poder sobrenatural. Se las arregla para escapar, pero cuando encuentra a su pandilla, se rebela contra Kaneda y termina abandonando el grupo.